Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos
La Iglesia Católica únicamente acepta el uso del preservativo como última opción, en el contexto de una estrategia de prevención integral en la lucha contra el sida. En cualquier caso, la jerarquía eclesiástica desaconseja el uso de este medio profiláctico al considerar que no es un método que "no garantiza el sexo seguro", según explicó esta tarde el secretario general de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino. En declaraciones a la Cadena COPE, Martínez Camino precisó que la doctrina de la Iglesia "coincide no plenamente pero sustancialmente" con el programa ABC (abstinencia, fidelidad y preservativo) suscrito por unos 150 expertos en la revista "The Lancet". "Si no se quiere ser unilateral y por tanto ineficaz debe tener en cuenta estos tres pilares, por este orden, y diferenciado en función a las poblaciones a las que se dirige", subrayó el portavoz de la Conferencia Episcopal. Martínez Camino quiso zanjar así la polémica suscitada en los medios de comunicación a raíz de las declaraciones que realizó tras su reunión con la ministra de Sanidad, Elena Salgado, el pasado martes. De hecho, declaró que la Iglesia contempla el uso del preservativo para aquellas personas "que ni se abstienen o no son capaces (de lograr la abstinencia sexual) o no pueden ser fieles a una relación sexual con una pareja estable", manifestó. Partiendo de esta aclaración, Martínez Camino se reafirmó en las declaraciones realizadas el martes pasado, tras ser preguntado sobre si la Iglesia acepta el uso del preservativo: "los medios preservativos tienen su contexto en una prevención integral y global del sida", dijo entonces. El portavoz de los obispos explicó que su entrevista con la ministra Salgado fue a iniciativa de la Iglesia española "para comentar determinados asuntos referentes a la transmisión sexual del VIH" y para transmitirle su preocupación sobre la transmisión "errónea" del mensaje pastoral por parte de los medios de comunicación. Según Martínez Camino, durante hora y media aclaró a la ministra que los obispos "no hablan de cosas sin tomar en cuenta lo que dice la ciencia" y que aunque no coincide con la postura del Gobierno, su tesis "no se basa en informaciones tan falsas como que el preservativo no protege". A partir de ahí, la Iglesia Católica insiste en recomendar la abstinencia, en especial a los jóvenes, hasta alcanzar un nivel de madurez que les permita ser fieles a una sola pareja. Por lo demás, insisten en que el preservativo "no es sexo seguro" y ofrece "una protección mínima". En todo caso, creen que es "menos inseguro" que mantener relaciones sexuales sin protección o, tal y como indicaron a Europa Press fuentes del episcopado, la Iglesia se inclina por la doctrina del "mal menor". Por tanto, Martínez Camino cree que el origen del "malentendido" fue la brevedad de sus declaraciones a la prensa -"de apenas un minuto y medio"- y una interpretación "extremista" por parte de los medios. Estas palabras y su repercusión al día siguiente por parte de los medios de comunicación internacionales y, más en concreto, por la prensa de Roma, provocó una llamada por parte del cardenal Alfonso López Trujillo, presidente del Pontificio Consejo para la Familia y miembro de la curia vaticana. No obstante, asegura que esta llamada no fue recriminatoria, sino para intercambiar impresiones sobre el asunto y tratar de ofrecer "de manera conjunta" la versión oficial de la Iglesia Católica. Martínez Camino asegura que tampoco se produjo ninguna reunión con el presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, aunque mantuvieron una reunión telefónica en una pausa de la Comisión de la Archidiócesis de Madrid. En conclusión, según el portavoz de los obispos, no hubo "tirón de orejas" y la visión sobre la Iglesia respecto al uso del preservativo sigue siendo la misma: "si usted mantiene unas relaciones responsables y ordenadas no tendrá riesgo, pero sí lo habrá si anda jugando a ponerse el preservativo porque no sabe si puede contagiarse o no". |