Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Los implantes de seno en las mujeres que han sido sometidas a una mastectomía como tratamiento del cáncer de mama no reducen la supervivencia a largo plazo de las pacientes, según los resultados del primer estudio que observa estos efectos de los implantes mamarios, del que informa la revista 01CBreast Cancer Research01D.



Informes previos habían mostrado que estos implantes no tenían efectos adversos a corto plazo en la salud de las pacientes de cáncer, pero no existía un estudio representativo que se ocupara de este asunto a más largo plazo. Para ello, un equipo investigador de la Northern California Cancer Center (Estados Unidos) y otros expertos han analizado los datos del Estudio de Supervivencia, Epidemiología y Resultados Finales de Implantes de Seno, llevado a cabo en el estado de Iowa, y las áreas metropolitanas de San Francisco (California) y Seattle (Washington).



El estudio recopiló datos de más de 4.000 mujeres de menos de 65 años diagnosticadas de cáncer de mama en un estadio temprano de la enfermedad. Todas ellas habían sido sometidas a una mastectomía y seguidas durante los 12 años posteriores a su diagnóstico. El análisis de la información reveló que, del 21% de mujeres que habían tenido un implante de seno tras la mastectomía, la tasa de mortalidad por cáncer de mama se situó en el 12,4%, frente al 19,7% que registraron las mujeres que no se sometieron a una operación para realizar un implante.



De un modo recurrente, las mujeres eran más jóvenes y de raza blanca y no hispana que las que no recibieron implantes. Tras ajustar los análisis a estos y otros factores sociodemográficos, los autores concluyeron que la mortalidad en cáncer de mama en pacientes con implantes era alrededor de la mitad que en los pacientes sin ellos. "No obstante, se precisan nuevas investigaciones para encontrar una explicación a este diferencial de supervivencia" entre ambos grupos de mujeres "que estudien factores potencialmente aclaratorios como el estatus socioeconómico, la comorbilidad, el tabaquismo u otros factores relacionados con los hábitos de comportamiento", señalaron los autores.



Los implantes mamarios pueden impulsar la moral y autoestima de las pacientes con cáncer de mama, que podrían mejorar su supervivencia. Además, podrían tener otros efectos indirectos, como el propiciar una mejor asistencia sanitaria y de seguimiento de las mujeres con implantes. Asimismo, algunos estudios parecen sugerir que los implantes de mama podrían estimular también el sistema inmune y reducir el flujo sanguíneo hacia los pechos, perjudicando de este modo el crecimiento celular y del tumor.



Breast Cancer Research 2005;7:R184-R193