Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La implantación de marcapasos a los pacientes con epilepsia podría evitar muertes inesperadas como consecuencia de la ralentización o paralización de la actividad cardiaca que sufren algunos de estos paciente durante los ataques epilépticos, según un estudio del Instituto de Neurología de Londres (Reino Unido) que se publica en la revista The Lancet.



Los resultados del estudio resaltan cómo la interrupción del ritmo cardiaco es una consecuencia poco conocida de los accesos epilépticos y que el uso de marcapasos cardiacos por algunos pacientes con epilepsia podría ser una protección contra las repentinas e inexplicables muertes en este tipo de pacientes.



Los pacientes con epilepsia sufren un alto riesgo de muerte súbita inexplicable. Los investigadores creen que el ritmo irregular cardiaco resultado de la disfunción neurológica durante los ataques podría ser la causa de estos fallecimientos.



Los autores del artículo estudiaron a 20 pacientes con epilepsia a los que se les implantó un dispositivo para supervisar los ritmos cardiacos. Estos dispositivos estaban programados para registrar automáticamente latidos a un ritmo muy reducido (bradicardia de 40 latidos por minuto o menos) o a un ritmo muy rápido (taquicardia de 140 pulsaciones o más por minuto).



Los pacientes fueron estudiados durante 22 meses y se registraron los patrones electrocardiográficos de sus ritmos cardiacos durante 377 accesos de epilepsia. En 16 de los pacientes la frecuencia cardiaca durante los accesos ordinarios excedía los 100 latidos por minuto. Cuatro pacientes tenían bradicardia o periodos de asistolia y se les insertó un marcapasos de forma permanente.



Según John Duncan, del Instituto de Neurología de Londres, "el estudio muestra que los circuitos de registro implantados pueden identificar anormalidades cardiacas graves que podrían ser fatales en pacientes con epilepsia, y sugieren que la incidencia de bradicardia y asistolia ha sido antes poco conocida".



Según Duncan, en una proporción de muertes súbitas inesperadas en la epilepsia subyace la asistolia, lo que se podría prevenir con la inserción de marcapasos. Los científicos consideran que estos resultados suponen un importante paso adelante pero advierten de que es demasiado pronto para cambiar la práctica clínica hasta que sean confirmados es estudios más amplios.