Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Los estudios sobre la difusión del sida en Europa muestran una reducción de nuevos casos -una caída del 24% respecto del 2002- y una concentración del 50% de los contagios en Italia y España. Por otra parte, se menciona un aumento del número de nuevos infectados por VIH, que pasó de 7 641 reportados en 1996 a 13 257 en el 2003, es decir, un 75%. Eurostat, el servicio estadístico de la Unión Europea, al trazar el perfil de la enfermedad en los 25 países europeos, subrayó la preocupante progresión del virus, poco más del 40% a través de contactos heterosexuales donde las más afectadas son las mujeres.

De hecho, Europa parece haberse olvidado de las mujeres en la lucha contra el sida. En 2003, el 69,5% de los nuevos casos de sida diagnosticados en las europeas era consecuencia de relaciones heterosexuales no protegidas, en 1995 eran un 43,8%. Esta cifra es superior en un 80% en Francia, Suecia, y Dinamarca, y llega al 90% en el Reino Unido y Bélgica. En Grecia es del 100.

A días de la jornada mundial de la lucha contra el sida que afecta en el mundo a 39,5 millones de personas, la UE presenta un cuadro de la situación que no parece nada tranquilizador, sobre todo desde el punto de vista de la transmisión.

La incidencia de la enfermedad en Europa se estima en 14,2 casos por millón de habitantes, pero las diferencias de país a país son importantes. En el primer lugar está Portugal con 78,6 casos por millón de habitantes, y en el último, Eslovaquia, con 0,4%.

En suma, Europa no puede permitirse bajar la guardia en relación con la difusión del sida y sus ministros de Salud examinarán la situación en cada uno de sus 25 socios el próximo 6 de diciembre. En la ocasión se encarará el problema de la transmisión de la infección que en el 41,8% de los casos nuevamente diagnosticados es producido por contactos heterosexuales no protegidos, por el uso de drogas endovenosas, en un 30,7% y por relaciones homosexuales, en un 20% aproximadamente.