Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Pese a los grandes avances de la ciencia en la lucha contra las enfermedades, es deficiente la aplicación del conocimiento para mejorar los sistemas de salud, advierte un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Según el "Reporte mundial sobre el conocimiento para una mejor salud", difundido en Ciudad de México, existe en el mundo "una brecha entre lo que se sabe y lo que se está haciendo en realidad" y una enorme disparidad e inequidad en la administración de la salud.

"La mitad de las defunciones mundiales podrían prevenirse mediante intervenciones sencillas y costo-eficientes", dice el documento, que servirá de base para la Cumbre Ministerial sobre Investigación en Salud de OMS, del 16 al 20 de noviembre en Ciudad de México. Según la OMS, en estas condiciones será difícil en muchas partes del mundo que se cumplan las Metas del Milenio fijadas en materia de salud por las Naciones Unidas en el 2000, como la reducción de la mortalidad infantil en dos terceras partes.

En la introducción al informe, el director general de la OMS, Lee Jong-wook, afirma que la ciencia es la principal aliada en el combate de enfermedades como el sida, la tuberculosis o el paludismo. Sin embargo, "existe un sentimiento de que la ciencia no ha hecho lo suficiente" en momentos en que es necesario "reducir las disparidades globales en salud mediante el fortalecimiento de los sistemas de salud". El informe de la OMS, que consta de cinco capítulos, evalúa el estado actual de las investigaciones para el tratamiento, prevención y diagnóstico de enfermedades y pide una "transformación de los conocimientos en acciones".

"La ciencia debe contribuir a mejorar los sistemas de salud pública a nivel mundial. No se debe concentrar exclusivamente en la promoción de los conocimientos académicos ni en la fabricación de medicamentos, medios de diagnóstico, vacunas y dispositivos médicos", señala. Para ello, añade, es necesario fomentar investigaciones que permitan aplicar los descubrimientos biomédicos de manera específica para cada grupo humano, en su respectivo contexto político y social. "Cada país debe tener un sistema nacional de investigaciones sobre la salud que concentre sus energías en los problemas de salud de interés nacional", plantea el informe, que llama a una universalización de la investigación científica. Además, la OMS afirma que "el acceso equitativo a los resultados tanto publicados como inéditos de las investigaciones constituye una prioridad" para mejorar las políticas y los sistemas de salud a nivel global. Como plan de acción, el documento propone más inversiones para una investigación "innovadora", la administración más eficaz de los conocimientos y su transformación en acciones concretas para el mejoramiento de la salud.