Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Científicos estadounidenses y británicos crearon un tipo de antibiótico común que puede eliminar las células que causan cáncer en ratones, es un hallazgo que abre así el camino para nuevos tratamientos contra la enfermedad.

Según informaron los investigadores de la Universidad de Stanford, Estados Unidos y del Cancer Researsh UK de Gran Bretaña, en un artículo publicado en la revista Nature, el antibiótico fue efectivo en desactivar un gen llamado Myc, que se sabe actúa como provocador de cáncer. Los expertos informaron que los ratones de prueba se mantuvieron libres de cáncer mientras se les administraba el fármaco, pero una vez interrumpido el tratamiento, empezaron a desarrollar cáncer del hígado.

"Este estudio promete ser un camino para la fabricación de medicamentos contra el cáncer", declaró el director de la investigación, Dean Felsher, quien además aclaró aumenta la esperanza que las investigaciones también puedan aplicarse en un futuro al cáncer de mama, del colon y de próstata. Esto se debe a que todos estos cánceres, al igual que el de hígado, tienen su origen en las células que revisten el cuerpo, conocidas como células epiteliales.

Para el Cancer Research UK, el gen puede contribuir a una de cada siete muertes por la enfermedad. Los científicos de la Universidad de Stanford estudiaron a los ratones cuyas células hepáticas habían sido alteradas para portar el gen Myc que produce el cáncer y que controla la división de las células. Al contrario de la versión normal de ese gen, la versión modificada se mantuvo permanentemente activa, lo que significa que las células se dividían constantemente y algunas se convertían en células cancerígenas.

Los científicos confirmaron que al alimentar a los ratones con el antibiótico doxicilina, el gen defectuoso se desactivó interrumpiendo el crecimiento del cáncer, y cuando detuvieron el suministro de ese antibiótico, los ratones volvieron a desarrollar cáncer hepático agresivo. Al reintroducir la doxicilina en su alimento, no sólo se desactivó otra vez el gen Myc, sino que las células cancerígenas regresaron a la normalidad. "Lo emocionante es que las células cancerígenas pueden regresar a algo que aparenta ser normal", explicó Felsher, quien añadió que aunque las células aparentaban ser normales, todavía tenían la habilidad de convertirse en cancerígenas si se descontinuaba el antibiótico". Eso parece explicar por qué algunos cánceres regresan después que los pacientes han sido sometidos a quimioterapia, agregó el médico. "Este es un cáncer terrible. Cualquier cosa que dé muestras positivas en el tratamiento del cáncer hepático podría ser importante", concluyó el experto.