Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un nuevo estudio, desarrollado por investigadores de Brown University y de Duke University Medical Center (ambos en EE.UU.) y publicado en la última edición de la revista Science, demuestra que cuando se administra LTP en el hipocampo, dos regiones curvadas que flanquean el centro del cerebro, se producen cambios en las sinapsis. Estas conexiones entre las neuronas, que son los lugares principales de intercambio de información en el cerebro, se hacen más fuertes después de una estimulación repetida.



Esta fuerza sináptica aumentada puede durar horas y hasta días y se cree que es la base celular de la memoria. Los receptores AMPA de la membrana de la neurona que recibe la información, conocida como célula postsináptica, actúa como una puerta que se abre en respuesta a los mensajes químicos de una neurona vecina. Durante LTP aparecen receptores AMPA extra, aumentando la fuerza sináptica.

La pregunta que se han planteado los autores del presente estudio es: ¿de dónde vienen estos receptores extra?. Los investigadores demuestran que las endosomas de reciclaje, o compartimentos unidos a la membrana dentro de las neuronas, portan una reserva de estos receptores. Inyectando a proteínas mutantes con tinte verde fluorescente, dentro de neuronas del hipocampo de ratas, los investigadores observaron que los receptores AMPA se almacenaban en endosomas recicladoras. Cuando las neurona es estimulada, los receptores AMPA dejan este compartimento y se apresuran hacia la espina dendrítica por tres proteínas carabinas: Rab11a, Rme1, y Syn13. Estos receptores adicionales se insertan después en la membrana del plasma, aumentando la recepción de información formadora del recuerdo.