Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Algunos países han realizado grandes esfuerzos por mejorar la situación de los derechos y la salud reproductiva de las mujeres, pero todavía hay mucho que hacer para alcanzar los objetivos establecidos hace una década en una conferencia de la ONU, según un estudio divulgado el martes.

Un total de 23 países, incluidos Bangladesh, Nepal, Perú y Filipinas, han realizado los mayores progresos desde la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo de 1994 en El Cairo, pero otras naciones han hecho poco al respecto.

Burkina Faso y Camerún se han quedado rezagados, según el estudio presentado durante un encuentro de tres días para evaluar la situación de la mujer con motivo del décimo aniversario de la conferencia de El Cairo.

"Considero que hemos hecho grandes progresos desde El Cairo", dijo en rueda de prensa Jill Sheffield, presidenta de la organización no gubernamental Family Care International, con sede en Nueva York.

Sin embargo, Sheffield añadió que aún existe un largo camino por recorrer.

En la reunión de El Cairo hace una década, 179 miembros de las Naciones Unidas establecieron los objetivos de asegurar la salud reproductiva, la educación y los derechos de las mujeres para disminuir la mortalidad infantil y frenar el crecimiento de la población para el 2015. El encuentro londinense, llamado Cuenta regresiva hacia el 2015, marca el punto medio del plazo establecido.

"Hoy estamos justo a la mitad del plan que no sólo salvará millones de vidas, sino que también apunta hacia la reducción de la pobreza", dijo Thoraya Obaid, directora ejecutiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, en inglés).

Obaid identificó tres áreas decisivas -la salud materna, el virus de inmunodeficiencia adquirida (VIH), que causa el sida, así como el financiamiento y acceso a condones y anticonceptivos- para lograr los objetivos del 2015.

"Dar a las mujeres acceso a información y servicios de salud reproductiva es el camino más seguro para ayudar a evitar las infecciones de transmisión sexual. Esto también las salvará de embarazos no deseados y de abortos riesgosos", añadió Obaid.

El estudio utilizó varios criterios, como las muertes materno-infantiles, el número de niños, las políticas abortivas, el promedio de bebés y la cifra de infecciones por VIH, para clasificar a 133 países con una población superior a un millón de habitantes con respecto a los cambios logrados.

Entre los países desarrollados, Kuwait, Portugal y Estados Unidos han realizado poco o ningún progreso, al igual que en naciones pobres como Botswana, Namibia, Senegal y Sudáfrica.

El estudio destaca los logros en el uso de anticonceptivos y el aumento de la matrícula de adolescentes femeninas en la educación secundaria.

Asimismo, en la actualidad se seleccionan más mujeres para formar parte de los parlamentos que hace 10 años, pero todavía poseen poca representación.

A pesar de haber mejorado el acceso a los anticonceptivos, estos no están disponibles para 123 millones de parejas que quieren esperar antes de tener otro hijo.

Uno de cada 10 embarazos termina con un aborto riesgoso, en los que muere una mujer cada siete minutos, según el estudio.

"Invertir en la salud sexual y reproductiva, y en los derechos transforma vidas: la vida de una mujer, la vida de su familia y, además, la vida social y económica de todo su país", dijo Amy Coen, presidenta del grupo Population Action International.

Unos 700 expertos en salud, dirigentes y activistas de 109 países acudieron a la reunión organizada por un grupo de organizaciones no gubernamentales