Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La epidemia del sida está en sus inicios y es reflejo de la pobreza y desigualdades sociales que afectan al planeta, diferencias entre ricos y pobres, mujeres y hombres, expresó Peter Piot, director ejecutivo del programa ONUSIDA. Al hablar en la inauguración del II Foro en VIH/SIDA/ITS en América Latina y el Caribe, a la que asistió el presidente Fidel Castro, Piot destacó que el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida) exige la máxima atención de las autoridades sanitarias y una inmediata respuesta, pues cerca de dos millones de personas viven con el mal en la región.

Sin embargo, la mortal enfermedad es sólo uno de los problemas que afectan al mundo actual: guerras, degradación ambiental, calentamiento de la Tierra, son también parte del panorama que prevalece, expresó ante los más de 1 300 delegados de una treintena de naciones. Pero a la epidemia de sida debemos prestarle especial atención, subrayó el alto funcionario, hay que evitar que se atrinchere en las poblaciones marginadas, homosexuales, profesionales del sexo, consumidores de drogas, trabajadores inmigrantes pobres y las minorías étnicas.

La cifra de personas que viven con VIH/sida -manifestó- es un indicador que no hemos sabido trasladar nuestros conocimientos a gran escala para su prevención. Si bien se han alcanzado notables logros en el aseguramiento del acceso a la atención y tratamiento de las personas infectadas en América Latina y el Caribe, aún persisten importantes lagunas a la hora de desplegar intervenciones preventivas eficaces, precisó Piot.

Las crisis económicas y políticas que afectan a algunos países del área amenazan con socavar los programas de prevención y el suministro de tratamiento; se necesita liderazgo desde las altas esferas, pero esto sólo se logra cuando la sociedad civil se involucra plenamente en la conducción de la respuesta a la enfermedad, agregó. Cuba es ejemplo de ello, añadió, fue uno de los primeros países en darle respuesta integral y combinar la prevención con la atención. Actualmente la mayor isla de las Antillas exhibe la tasa de infección de sida más baja del mundo, pues enfrentó la enfermedad muy tempranamente y actualmente tiene tratamiento para el 100% de los afectados, destacó. Igualmente resaltó los programas nacionales que permiten el acceso de toda la población, así como que cuenta con una sociedad civil muy activa y comprometida.

En otra parte de sus palabras se refirió a la fidelidad, abstención, uso del condón, como principios que deben tenerse presentes en la lucha contra el sida reforzados por las políticas de los países, añadió. El director ejecutivo de ONUSIDA enfatizó: nuestro lema de hoy es no perder de vista lo conseguido. No retrocedamos en la lucha contra el sida, concluyó.

El Foro 2003 se extenderá hasta el próximo sábado y entre los temas centrales de su agenda están los relacionados con las ciencias básicas, atención, prevención, estudios comportamentales y epidemiológicos, respuesta social y políticas públicas. Durante el encuentro se efectuará una conferencia magistral del director ejecutivo de ONUSIDA, Peter Piort, quien tiene previstas reuniones con los ministros cubanos de Salud, Educación y Relaciones Exteriores, entre otros.