Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Especialistas alemanes informaron en Hannover que la implantación de células madre después de un infarto puede regenerar el tejido cardíaco que quedó destruido y propiciar de esa forma una mejor recuperación del paciente.

En un estudio de la Universidad médica de Hannover se indicó que las células madre procedentes de la médula ósea ejercen una influencia positiva en la reparación del tejido cardíaco después de un infarto, probablemente por los efectos hormonales.

Según los especialistas de la universidad de Hannover, las células madre expiden sustancias que estimulan la creación de nuevo tejido en los vasos sanguíneos, aunque no creen, que las células madre, una vez en el corazón, evolucionen en músculo cardíaco. Los expertos trataron a 30 pacientes a los que abrieron el vaso sanguíneo cardíaco con un catéter y a otros 30 pacientes que les retiraron días después del infarto células madre de la médula ósea y se las introdujeron a través de un catéter en la vena abierta. Seis meses después, el trabajo de la cámara izquierda del corazón aumentó 6,7% en los pacientes que se les implantó la célula madre, mientras que en el grupo al que no se le aplicó, la mejoría del trabajo en esa parte del corazón fue de 0,7%.

El equipo de investigación, encabezado por el director del departamento de Cardiología y Angiología de esa universidad, Helmut Drexler, destacó que cuando se produce un infarto, la rápida apertura de la arteria cerrada es muy importante. Agregó que las células del músculo del corazón mueren pronto cuando les hace falta oxígeno y muchas veces la ayuda médica se produce demasiado tarde y entonces quedan daños permanentes en el corazón a causa del infarto. El resultado es que las cámaras del corazón se agrandan y la potencia del bombeo se reduce, explicó el grupo de especialistas alemanes. Agregaron que hasta el momento habían hecho falta estudios en dos grupos de control para comparar el ritmo de la recuperación cuando se aplican la terapia usual y la que utiliza células madre.

El equipo médico del doctor Drexler señaló que son necesarios estudios más amplios para constatar si el uso de células madre repercute en forma positiva en el corazón del paciente a largo plazo y si con ese método se pueden evitar ataques cardíacos posteriores.