Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un equipo de expertos de 14 países europeos aconsejó combinar las estrategias farmacológicas con otras educativas y físicas a la hora de tratar la artrosis de cadera, según un documento divulgado por la prensa local. Se trata de asociar los medicamentos descritos contra el mal con un apoyo ortopédico, bastón, plantilla, ejercicios físicos, un mayor conocimiento del problema y métodos para la reducción del peso en caso de personas obesas o con sobrepeso, destacan los especialistas. Dichas recomendaciones, destinadas a guiar las decisiones clínicas en el manejo de ese padecimiento, fueron presentadas en Berlín por 18 reumatólogos, cuatro cirujanos ortopédicos y un epidemiólogo, durante el Congreso de la Liga Europea contra el Reumatismo (EULAR). Para llegar a estas conclusiones los expertos acumularon evidencias clínicas publicadas exclusivamente sobre la artrosis de cadera. En su búsqueda sistemática en la literatura lograron recuperar unos mil 300 artículos. Los documentos se clasificaron según el nivel de evidencia y por medio de un método de consenso Delphi, que refleja el criterio de la mayoría de los científicos.

La artrosis de cadera se debe tratar de manera distinta a la de rodilla, señaló Michael Doherty, profesor de Reumatología de la Universidad de Nottingham, Reino Unido y coordinador del panel de expertos que redactaron las sugerencias. En ese contexto, explicó que la prevalencia, los factores de riesgo, la carga genética y las características clínicas difieren en esas dos patologías. A ello se unen también las diferencias anatómicas existentes entre ambas articulaciones. La artrosis de cadera tiene un mayor riesgo de progresar y necesitar una intervención quirúrgica como solución que la de rodilla y que prevalecía entre el tres y el 11% en la población occidental de más de treinta y cinco años, agrega el artículo.

Por su parte, Klaus-Peter, cirujano ortopédico de la Universidad de Dresden, Alemania) y uno de los expertos del comité de la Eular, indicó que el 74% de los casos con artrosis de cadera llegan a necesitar cirugía, y sólo el 19% se controla adecuadamente con fármacos. Los medicamentos más usados para tratar este tipo de dolencia son los antinflamatorios no esteroides (AINE). Sin embargo, su eficacia se ve reducida por los efectos adversos que producen.

Debido a ello, el paracetamol se ha situado como tratamiento de primera línea en estas recomendaciones, al tener en cuenta su perfil de eficacia y seguridad.