Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Para mantenerse despierto durante prolongados períodos de tiempo, lo mejor es tomar dosis pequeñas y frecuentes de cafeína, según un estudio publicado en la revista "Sleep" por investigadores del Rush Universtity Medical Center de Chicago (Estados Unidos).



Señalan que las dosis repetidas de cafeína contrarrestan el deseo natural del dormir permitiendo así mantenerse despierto. Sin embargo, comentan que la mayor parte de la gente utiliza la cafeína de forma equivocada, bien tomando unas pocas tazas de café o té por la mañana o grandes vasos de café camino del trabajo. El especialista en trastornos del suelo James Wyatt explica que, de ese modo, los niveles de cafeína en el cerebro van disminuyendo a lo largo del día.



Se cree que la cafeína bloquea el receptor para la adenosina, un mensajero químico implicado en el sueño. En el experimento participaron varios varones que estuvieron en habitaciones privadas durante 29 días sin conocer la hora del día o de la noche. Se estableció que debían permanecer despiertos durante 29 horas seguidas, simulando el horario que en ocasiones tienen algunos médicos de guardia, militares y personal de servicios de emergencia.



Aquellos participantes que tomaron un comprimido de una pequeña dosis de cafeína cada hora obtuvieron mejores puntuaciones en pruebas que comprobaban su estado de atención que los individuos que recibieron placebo. Además, los que tomaban cafeína tenían más ganas de dormir cuando finalmente llegaba la hora de acostarse.



"Aunque no hay un sustituto perfecto al sueño, nuestros resultados apuntan que el mejor método para mantener una atención y vigilancia óptimos es usar cafeína en pequeñas dosis y frecuentemente, en particular cuando uno tiene que permanecer despierto durante más tiempo que las tradicionales 16 horas diarias", escribe el Dr. Wyatt.