Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El médico italiano Severino Antinori aseguró el miércoles que tres niños nacieron ya con la técnica de la clonación humana con fines reproductivos.

En una conferencia de prensa para presentar el Congreso de la Asociación Mundial de Medicina Reproductiva (WARM), que se realizará en Roma, el ginecólogo confirmó que conocía situaciones relativas a la clonación humana. Sé que tres casos salieron bien", afirmó. Confirmando lo anunciado en febrero del 2004 en el Congreso de Medicina de la Reproducción de Abano Terme, noreste de Italia, Antinori declaró que no quiere decir más sobre el tema: "Es un hecho confirmado, pero no puedo decir más", aseguró.

El ginecólogo prefirió no mencionar ni siquiera el estado de salud de los tres niños, pero al referirse al experimento surcoreano sobre el que se informó en febrero pasado la revista Science y en el cual se obtuvieron embriones humanos desarrollados hasta el estadio de 60 a 80 células (blastocitos), dijo que los blastocitos obtenidos en ese experimento estaban en buenas condiciones. "Lo mismo pienso de los niños que probablemente hayan nacido", indicó.

Antinori prefiere no utilizar el término clonación, acompañado actualmente por una connotación negativa, aunque no tiene dudas que funciona la técnica, que consiste en la transferencia del núcleo de una célula adulta dentro de una célula huevo para volver a programarla y obtener así un embrión.

No se pueden imaginar, según Antinori, los progresos obtenidos con la técnica de la transferencia nuclear y gracias al experimento surcoreano "la clonación terapéutica es un hecho". El actual, agregó, es un escenario completamente diferente, del de agosto del 2001, cuando la Academia de Ciencias de Estados Unidos convocó a hablar sobre clonación humana. "Los científicos decían entonces que no funcionaba", observó Antinori, pero el experimento de Seúl publicado en Science constituye hoy "un hecho tremendamente significativo, que desmiente toda previsión negativa".

Pero más que a niños-fotocopia, según Antinori, la técnica de la transferencia nuclear abre el camino a experimentos de otro tipo. Es posible, por ejemplo, recuperar de embriones obtenidos mediante esta técnica, células madre para transferir a los testículos de hombres infértiles. Las células madre podrían repoblar los testículos y permitir así que puedan tener hijos.