| La administración de dosis tempranas y elevadas de imatinib, fármaco comercializado por Novartis como Glivec, favorece una mejor y más rápida respuesta al tratamiento en pacientes con leucemia mieloide crónica (LMC), según los resultados de una investigación, divulgados durante un encuentro de hematólogos, celebrado en Madrid. El Dr. Jorge Cortés, hematólogo del MD Anderson Cancer Center de Houston (Estados Unidos), afirmó que "introducir dosis más altas de imatinib permite mejorar los resultados obtenidos con las dosis estándar en algunos pacientes", según un estudio realizado en su propio hospital y publicado recientemente en la revista "Blood". Asimismo, destacó la importancia del enfoque terapéutico en las fases más avanzadas en la enfermedad de la LMC. Por su parte, la Dra. Concha Boqué, hematóloga del Instituto Catalán de Oncología (ICO), explicó que "en los casos en los que no se obtiene una respuesta óptima para un paciente con LMC a los seis meses, aún existe una elevada probabilidad de éxito continuando el tratamiento, aumentando la dosis o combinándolo con otros fármacos". Esta especialista destacó "la simplicidad de la administración de Glivec, que presenta una escasa toxicidad y un riesgo nulo de producir daño por un exceso de dosis o de sensibilidad del paciente". Por otra parte, añadió que el futuro de la hematología dependerá del éxito de las terapias combinadas. "Los pacientes con mal pronóstico -por no haber obtenido respuestas citogenéticas con imatinib- podrán conseguirlas mediante tratamientos combinados", precisó. |
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