Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un grupo de científicos de Estados Unidos concluyó que el implante de desfibriladores cardioversores (DCI) puede mejorar la capacidad de supervivencia de los pacientes con deficiencias de bombeo del corazón, según un estudio difundido el jueves. El estudio, "Muerte cardíaca súbita en insuficiencia del corazón", (SCD-HeFT, en inglés) fue realizado con el patrocinio del Instituto Nacional del Corazón, el Pulmón y la Sangre (NHLBI) y de los Institutos Nacionales de la Salud (NIH).

En la investigación, destinada a determinar si la terapia de la amiodarona o la del DCI pueden mejorar la capacidad de supervivencia del paciente en comparación con el uso de placebos, participaron 2 521 pacientes de 150 centros de cardiología de Estados Unidos, Canadá y Nueva Zelanda.

Los especialistas dijeron que esas personas padecían de una insuficiencia cardíaca denominada clase 2 ó 3 (de leve a moderada).

El resultado primario de esos experimentos fue la reducción de la mortalidad por todas las causas cardíacas, mientras que el resultado secundario fueron muertes por causas específicas (arrítmicas y no arrítmicas).

El estudio tiene el potencial de demostrar aún más la eficacia de los DCI como terapia de prevención primaria, dijeron los especialistas.

Agregaron que los resultados de su trabajo también pretenden reforzar la importancia de una intervención quirúrgica temprana aún en pacientes con insuficiencia cardíaca leve.

Según los expertos, la mayoría de los estudios anteriores sólo ha analizado la terapia entre los pacientes con insuficiencia cardíaca más severa, y su seguimiento ha sido durante períodos cortos.

El SCD-HeFT fue diseñado para observar una clase más amplia de pacientes de insuficiencia cardíaca, verificar su estado de salud por mucho más tiempo y compararlos con un grupo de un tamaño mayor que cualquier estudio previo.

Según la Asociación Americana del Corazón, cinco millones de norteamericanos padecen de insuficiencia cardíaca congestiva (ICC).

Las personas con ICC sufren de paro cardíaco súbito (PCS) -una condición que causa la muerte de más de 450 000 norteamericanos cada año-, con una frecuencia de seis a nueve veces más que la de la población general.

El PCS es una pérdida abrupta y súbita de la función del corazón.

La mayor parte de los episodios de paro cardíaco súbito son causados por una actividad rápida y/o caótica del corazón llamada taquicardia ventricular (TV) o fibrilación ventricular (FV). Estas son anormalidades del sistema de conducción eléctrica del corazón, según los especialistas. Estos dijeron que el paro cardíaco súbito no es un ataque al corazón (infarto del miocardio), que es causado por un bloqueo de un vaso que lleva a pérdida del abastecimiento de sangre a una porción del músculo cardíaco. Sin embargo, algunas personas pueden experimentar un PCS durante un ataque de corazón. Un ataque previo es un factor que predice riesgo futuro.