Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Un estudio holandés, realizado por médicos de la Universidad Erasmus de Rotterdam y presentado en el Simposio Europeo sobre Tejido Calcificado, apoya la teoría de que el uso prolongado de estatinas puede disminuir el riesgo de fracturas óseas.



Se cree que estos fármacos utilizados para reducir los niveles de colesterol actúan de una forma similar a los bifosfonatos 013familia que previene las fracturas óseas- y algunos estudios anteriores han sugerido que incrementa la densidad mineral ósea.



Los datos presentados hacen referencia a cerca de 8.000 varones y mujeres mayores de 55 años. El estudio, iniciado en 1990, analizó los fármacos dispensados a cada participante a lo largo de la pasada década, y se realizaron radiografías para la detección de fracturas vertebrales al inicio de la investigación y entre 7 y 9 años después.



Al final del estudio se habían detectado fracturas vertebrales en 381 participantes. Los resultados indican que los usuarios de estatinas presentaron un riesgo de fractura un 36% inferior que los no usuarios. En opinión de los autores, "estos datos preliminares parecen apoyar la hipótesis de que el uso a largo plazo de estatinas está asociado con un menor riesgo de fractura vertebral", si bien ello no se confirmará hasta la realización de ensayos clínicos prospectivos aleatorizados.