Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Científicos de la Escuela Médica de Harvard han descubierto que un gen en la levadura es un regulador clave de la duración de la vida. El gen PNC1, es el primero que ha demostrado reaccionar específicamente a factores medioambientales que se saben que afectan a la duración de la vida en muchos organismos.



Los autores del nuevo estudio, publicado en la última edición de la revista Nature, han observado que PNC1 se necesita para la extensión de la duración de la vida que la levadura experimenta en situaciones de restricción calórica.



Una cepa de la levadura con cinco copias de PNC1 vive un 70 por ciento más tiempo que el tipo de cepa salvaje, lo que supone la mayor extensión de la vida observada en dicho organismo.



La proteína PNC1 regula la nicotinamida. Los autores del nuevo trabajo observaron previamente que la nicotinamida actúa como un inhibidor de Sir2, el miembro fundador de la familia de proteínas que controlan la supervivencia celular y la duración de la vida.



Sir2 extiende la duración de la vida en la levadura manteniendo al ADN ribosomial estable. PNC1 convierte la nicotinamida en ácido nicotínico, una molécula que no afecta a la duración de la vida. Al hacer esto, evita que la nicotinamida inhiba a Sir2, lo que permite que la levadura viva más.



El nuevo hallazgo indica que la duración de la vida no depende tan solo del metabolismo sino que está, al menos en parte, controlada por un programa genético activo en las células, un programa que se puede potenciar.