Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

El número de pacientes infectados por cepas resistentes aumenta cuando la proporción de individuos que no logra controlar bien la infección es más elevada, según se expone en uno de los estudios presentados en el XI Congreso sobre Retrovirus y Enfermedades Oportunistas que se celebra esta semana en San Francisco.



De esta forma, si el número de afectados con carga viral indetectable es bajo, el porcentaje de nuevos contagios con virus resistentes también será bajo. Esto es un dato más para demostrar que el control de la infección en los pacientes afectados aporta beneficios para la salud pública.



Los investigadores del Hospital Carlos III colaboran en 12 de estos estudios presentados en San Francisco, que tratan sobre aspectos clínicos, terapeúticos, virológicos o inmunológicos.



Otra investigación valora la eficacia de un nuevo inhibidor de la proteasa, el atazanavir, que será comercializado en un futuro próximo en España. Los datos demuestran que el fármaco es eficaz y seguro como tratamiento de rescate en pacientes que habían fracasado con otros tratamientos antirretrovirales.



Hasta ahora no se conocía exactametne la dosis más adecuada de este medicamento, cuyo principal efecto secundario era el aumento de bilirrubina. Los estudios realizados por el doctor Barrios y colaboradores, demuestran que sólo un 10% de los pacientes presenta hiperbilirrubinemia severa y que ésta se correlaciona con niveles altos de fármaco en plasma.



Un trabajo realizado en colaboración con 11 hospitales españoles, pretende demostrar que es posible la simplificación del tratamiento antirretroviral, dando medicamentos que se toman una sóla vez al día, sin que con ello se pierda eficacia. El tratamiento con didanosina, efavirenz y tenofovir, tres pastillas una sóla vez al día, tiene la ventaja de mejorar los niveles de colesterol y triglicéridos de los pacientes, y es casi igual de eficaz que tratamientos más complejos. La comodidad aumenta mucho, lo que puede garantizar que los pacientes cumplan mejor el tratamiento.



Coinfección con Hepatitis C



Uno de los aspectos de mayor interés en el momento actual en los pacientes con infección VIH es la presencia simultánea de infección por virus de la hepatitis C. Al mejorar el pronóstico vital de los pacientes con sida, la hepatitis se ha convertido en uno de las complicaciones más importantes de estos pacientes. Los investigadores del Hospital Carlos III comunican en San Francisco los resultados de un estudio en el que se analiza la eficacia del tratamiento con interferón pegilado y rivavirina en pacientes coinfectados.



La tasa de respuesta en los pacientes con ambas infecciones es menor, un 30-40% frente a un 50-60% de los pacientes que sólo tienen hepatitis C. Un dato que puede ayudar a saber si los pacientes van a responder al tratamiento es la cantidad de virus de la hepatitis C a los dos meses del inicio del tratamiento. Los pacientes que no tienen una bajada importante de los virus en sangre no tienen apenas posibilidades de responder, por lo que se podría suspender el tratamiento a los 2 meses, lo que evitaría efectos secundarios, en ocasiones importantes.



Pero, además de la hepatitis C, muchos pacientes con infección VIH están coinfectados por otros virus de la hepatitis. Los resultados de un análisis de los datos de la red EuroSIDA demuestran que un 9% de los pacientes con infección VIH tienen una infección activa por virus de la hepatitis B, y un 34% tienen una infección por virus de la hepatitis C. La presencia de estas infecciones no parece afectar a la respuesta al tratamiento antirretroviral, sin embargo los pacientes con coinfección tienen una mortalidad superior por causas no relacionadas con el sida.