El test de la PSA, el análisis que se hace a los varones para detectar síntomas de cáncer de próstata, puede que no obtenga resultados lo suficientemente beneficiosos en hombres mayores de 75 años, debido a la alta probabilidad que éstos tienen de fallecer por otra causa no relacionada con el tumor prostático, según un nuevo estudio. Esta nueva investigación, publicada en 'Journal of the Cancer Institute', muestra cómo aproximadamente un 32,5% de los hombres de este rango de edad (1,47 millones de estadounidenses) afirmó haberse sometido a esta prueba durante los 12 meses anteriores al comienzo del estudio. De los 7.889 participantes, un 88,4% destacó que fue su médico el que les sugirió hacerse el primer análisis y un 66,5% subrayó haber mantenido una conversación previa con el especialista sobre los pros y contras del test. "De algún modo, es sorprendente que tantos médicos recomienden el análisis [....] en hombres mayores cuando los beneficios no están establecidos claramente ni siquiera entre la población más joven", subrayan los autores. "No hay evidencia de que analizar a estas personas sea beneficioso para ellos, por eso puede que éste no sea el mejor uso de los recursos dirigidos a cuidar la salud", destaca el doctor Siu-Long Yao, autor del estudio. Entre el 30 y el 70% de los ancianos -apunta la investigación- fallecen teniendo cáncer de próstata pero sin ser éste el motivo. Por esta razón, Yao destaca que diagnosticarlo puede conllevar complicaciones innecesarias, en comparación con otros trastornos que pueden resultar más peligrosos, como los problemas cardiovasculares. El test de la PSA (antígeno prostático específico) detecta si existe un exceso de tejido prostático, que puede deberse a la presencia de un cáncer, pero también a una inflamación o al aumento propio de la avanzada edad de los sujetos. Debido a esta multiplicidad de factores, si se estima oportuno, suele realizarse una biopsia u otro tipo de pruebas para confirmar la patología. Por otro lado, según destaca 'The Washington Post', el autor explica que estos hombres suelen someterse más a la prueba del PSA que al test que determina los síntomas de cáncer de colon analizando la presencia de sangre oculta en heces. Se trata de un dato importante si se tiene en cuenta, como subraya el diario nortemericano en su edición digital, la existencia de diversos estudios que prueban cómo los pacientes que se someten regularmente al test del cáncer de colon tienden a vivir más. "Nos pareció sorprendente que algo (PSA) con un beneficio poco comprobado estuviese siendo empleado más comúnmente que los tests (sangre oculta en heces) que tienen 20 años de evidencias avalándolos", afirma Yao. En este sentido, él mismo concluye destacando la importancia de que los médicos dialoguen con los pacientes sobre los beneficios y las desventajas de realizar una prueba como ésta. |