Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

LA HABANA (AP) -- Más de 600 científicos cubanos y extranjeros concluyeron el viernes una semana de debates y presentaciones sobre biotecnología y sus productos incluyendo la presentación una vacuna sintética y la actualización de proyectos de sustancias contra el cáncer y el sida.

"Los temas de discusión se convirtieron en un foro de debate en el cual todos hemos avanzado. Nuevas ideas surgieron y posibilidades de colaboración se abren hacia el presente y el futuro", afirmó José Cremata, miembro del comité organizador.

Biotecnología Habana 2003 se especializó en las aplicaciones médicas de esta rama científica.

Encabezados por dos premios Npbel, el estadounidense Stanley Cohen (Medicina 1986) y el alemán Robert Huber (Química 1988) quienes dieron conferencias, se dieron cita en esta capital investigadores de 33 países.

Cuba cuenta con una de las biotecnologías más avanzadas en el continente. Estados Unidos acusó a la isla de tener infraestructura capaz de desarrollar armas de destrucción masiva, pero varias inspecciones de organismos internacionales descartaron esas afirmaciones.

La última sesión del foro, el viernes por la tarde, consistió en una mesa redonda de los directores de los principales institutos de la capital sobre los resultados logrados en sus centros: desde pruebas de diagnóstico, proyectos para vacunas contra el cólera y el sida; hasta investigaciones de punta en neurociencias y cáncer.

Entre 1980 y 1990 se desarrollaron tres sustancias (de ellas la más importante es la vacuna contra la meningitis), entre 2000 y 2003 se diseñaron otros 19 medicamentos y antes de 2005 se espera que hayan otras 38, explicaron los científicos.

"Lo que han logrado en Cuba es impresionante y espero que exista pronto una mayor cooperación con Estados Unidos", dijo Gillbert Omenn un profesor de la Universidad de Michigan presente en la sala. La delegación estadounidense fue una de la más numerosas.

El plato fuerte del evento fue la presentación el miércoles ante la comunidad científica de la primera vacuna sintética, una sustancia para combatir la bacteria que provoca meningitis y neumonía en niños pequeños.

Desarrollado durante años por el doctor Vicente Vérez de la Universidad de la Habana, el producto contra la Haemophilus Influenzae tipo B, permitirá fabricar dosis a bajo costo especialmente para los países menos desarrollados.