Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

Científicos japoneses descubrieron en el té verde un potente antioxidante capaz de inhibir el virus del sida, según un estudio publicado en el último número de la revista especializada Journal of Allergy and Clinical Immunology.

Aunque infusiones de esa bebida por sí solas no son suficientes para obtener estos beneficios, extractos de ella contienen cantidades suficientes de la sustancia galato de epigalocatequina (EGCG, en inglés) que puede ser un gran aliado para combatir el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), opinan los expertos.

El té verde es poco procesado con relación a otros tés orientales, de ahí que posea concentraciones elevadas de ese compuesto, señalaron. Estos resultados son una excelente noticia, destacaron los expertos, sin embargo aclararon que la investigación se encuentra en fase preliminar.

Son muchas las propiedades benéficas del té verde, bebida que ocupa a nivel mundial un segundo lugar en cuanto a consumo, después del agua. Estudios anteriores han destacado sus ventajas para combatir el cáncer, las dolencias cardíacas, la artritis, los problemas dentales y las alergias.