Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La dieta de estilo mediterráneo, rica en aceite de oliva y baja en carne, reduce los signos de inflamación que incrementan el riesgo de cardiopatía, según un estudio presentado en las Sesiones Científicas de la American Heart Association (AHA) que se celebran en Orlando (Estados Unidos).



Se trata de una evidencia más de que las dietas bajas en grasas y ricas en frutas y verduras previenen las enfermedades cardiovasculares, primera causa de mortalidad en el mundo desarrollado.



El nuevo estudio investigó los hábitos alimentarios de unos 3.000 varones y mujeres de Grecia, de 18 a 89 años de edad, sin enfermedad cardiovascular al inicio de la investigación. Cuando mayor era la adherencia a la dieta mediterránea del individuo menores fueron los niveles de distintos marcados inflamatorios, tal como mostró el Dr. Demosthenes Panagiotakos, de la Universidad de Atenas, principal investigador de este estudio, quien añadió que los resultados son independientes de otros factores como el índice de masa corporal, la actividad física, la edad, el sexo y el grado de educación.



Otro estudio, presentado en la reunión por investigadores de la Tufts University de Boston (Estados Unidos), ayuda a explicar por qué el consumo de pescado es beneficioso para el corazón. Según los autores, consumir dos platos de pescado a la semana 013sobre todo si se trata de atún, salmón o sardina- se relaciona con un empeoramiento más lento de las lesiones cardíacas, algo que es aún más evidente en mujeres diabéticas.



Por otro lado, diversas presentaciones han incidido en el tema de la dieta, concluyen globalmente que comer poco y perder peso se acompaña de un menor riesgo cardíaco. Dietas populares en Estados Unidos como la dieta Atkins (rica en grasa), la dieta Ornish (extremadamente baja en grasa) o la dieta Zone (rica en proteínas y moderada en hidratos de carbono) ayudan todas a perder peso y la reducir el colesterol, aunque por distintos mecanismos.



Según el Dr. Michael Dansinger, de la Tufts University, de media todas estas dietas redujeron el riesgo cardíaco entre un 5% y un 15%.