Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

La estadounidense Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) afirmó el jueves, en un comunicado, que no hay evidencias de que el consumo de carne y leche procedentes de animales de granja clonados represente un peligro para la salud humana. El comunicado de la FDA señala que "los productos comestibles procedentes de los clones normales y sanos, o de su prole, no parece plantear ningún riesgo de consumo", aunque advierte que esto no quiere decir que se vaya a autorizar su comercialización.

El veterinario jefe de la FDA, Stephen Sundlof, manifestó que la decisión final sobre su venta al público no se tomará hasta el año que viene y reconoció que todavía hay que avanzar sustancialmente en las técnicas de reproducción de animales clonados. "La frecuencia de nacimientos vivos normales sigue siendo baja, pese a que la situación parece mejorar según avanza la tecnología", manifestó el funcionario de la FDA, agencia que trabaja desde hace tiempo con el sector granjero para llegar a una conclusión.

La FDA, que hará publico un informe completo el viernes, al respecto, cita también la conclusión parecida a la que llegó recientemente el Consejo Nacional de Investigación, órgano asesor independiente del gobierno de Washington en materia científica. Una vez que la conclusión de las autoridades estadounidenses sea definitiva, estas deberán decidir si van a considerar la clonación como otra técnica más de reproducción asistida en animales o si cada producto requerirá una aprobación específica antes de su venta.

Algunas asociaciones de consumidores ya han expresado su oposición a la eventual comercialización de estos productos. La propia FDA reconoce, por su parte, la difícil salida que tendrían los alimentos procedentes de animales clonados en mercados como el de europeo, que sigue batallando con Estados Unidos por su oposición a los alimentos genéticamente modificados.