Revista de Ciencias Médicas de Cienfuegos

WASHINGTON.- Las autoridades agrícolas de EEUU han afirmado que las pruebas genéticas demuestran "con un alto nivel de certidumbre" que la vaca infectada con el mal de las "vacas locas" en el estado de Washington procedía de Canadá.



El jefe del servicio de inspección veterinaria del Departamento de Agricultura de EEUU, Ron DeHaven ha explicado que las pruebas de ADN "nos permiten verificar con un alto nivel de certidumbre" que el primer caso de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) en este país provino de una vaca importada de una granja en Alberta (Canadá).



El caso de EEB, anunciado el pasado 23 de diciembre, hizo que una treintena de países bloquearan la importación de carne de res estadounidense (entre ellos México, Japón y Taiwán, sus principales importadores).



Las autoridades estadounidenses han indicado que, con los resultados de estas pruebas, los investigadores podrán determinar el origen de la infección del animal enfermo.



DeHaven afirmó que durante esta semana se sacrificarán 450 terneros de una granja del estado de Washington, entre los que se encuentra una cría del animal infectado con EEB.



Explicó que se trata de una medida de precaución porque la cría no estaba debidamente identificada, pero aseguró que las reses se sacrificarán en el matadero pero no entrarán en la cadena alimenticia humana ni se destinará al consumo de otros animales.



El dueño de los terneros sacrificados será compensado con un pago conforme a los precios del mercado, agregó.



Los bovinos de la localidad de Sunnyside son una de las tres granjas en cuarentena en el estado de Washington. Las otras dos incluyen vacas que posiblemente procedieron del mismo lugar en la que nació la vaca enferma en la provincia canadiense.